FLOW

ORIGEN

El estilo Flow se ha desarrollado como una evolución natural del yoga tradicional, influenciado por las prácticas de Ashtanga y Hatha Yoga. Este estilo se originó en la India y se popularizó en Occidente a finales del siglo XX, gracias a maestros que buscaban una práctica que uniera la respiración con el movimiento en un flujo continuo y creativo. Flow Yoga es muy flexible en su estructura, lo que permite a los instructores y practicantes adaptar las secuencias a sus necesidades y objetivos, haciendo de esta una práctica dinámica y versátil.

PROFESORES | Blanca y Helena

COMO ES LA PRÁCTICA

Flow

Flow Yoga es una práctica dinámica y fluida que se distingue por la transición suave y continua entre posturas, sincronizadas con la respiración. Cada movimiento está ligado a una inhalación o exhalación, creando un flujo ininterrumpido que convierte la práctica en una especie de «danza» meditativa.

Comenzamos con un calentamiento suave, utilizando posturas simples para despertar el cuerpo y conectar con la respiración. A medida que la clase avanza, las secuencias se vuelven más complejas, incorporando posturas de pie, equilibrios, extensiones, torsiones, y eventualmente posturas invertidas, dependiendo del nivel del grupo o del practicante. El ritmo de la clase puede variar desde secuencias lentas y meditativas hasta flujos más rápidos y vigorosos, ofreciendo la libertad de explorar movimientos creativos y experimentar con diferentes transiciones.

Flow Yoga es ideal para quienes disfrutan de una práctica activa y fluida que desafía tanto el cuerpo como la mente. Es especialmente atractivo para aquellos que buscan una práctica que permita la expresión creativa y la exploración de diferentes movimientos, manteniendo siempre una fuerte conexión entre la respiración y el movimiento.

Intensidad Alta

Aéreo
Ashtanga
Flow
Jivamukti
Power
Spiritual Warrior
Vinyasa